Alergia al gluten, intolerancia al gluten y celiaquía son cosas muy distintas. Es bueno siempre saber la diferencia que existe entre ellas. Bio XXI te lo explica todo.
Últimamente estamos viendo la aparición de todo tipo de productos con el sello libre de gluten. Por lo general estos productos están dirigidos a aquellas personas que padecen la enfermedad de celiaquía u otro tipo de intolerancia al gluten (proteína que se encuentra en la semilla de cereales como el trigo, la avena, la cebada o el centeno). Las personas con estas enfermedades sufren lesiones severas del intestino y los síntomas pueden variar entre: diarreas o estreñimientos severos, pérdida de peso y malnutrición, cambios de carácter, y otros. Deben seguir una dieta estricta eliminando el gluten de su alimentación.
Aunque enfermedad celiaca afecta a alrededor del 1% de las personas del mundo desarrollado,cada vez son más las personas que, sin tener una intolerancia diagnosticada, han adoptado una dieta libre de harinas de trigo para sentirse más deshinchada y mantener a raya esos kilos de más.
Alrededor de 70 millones de estadounidenses -el 29% de la población adulta- aseguran que están tratando de cortar el consumo de gluten, según la empresa de investigación de mercados NDP. De esta cifra, hay un 22% (53 millones) que no sufren una enfermedad vinculada con el gluten, pero aun así lo quieren eliminar de su dieta.
En los últimos años se han multiplicado los diagnósticos de celiaquía, intolerancia y alergias al gluten. En parte esto se debe a que hay más información y concientización acerca de estas patologías. La gente recurre con más frecuencia al diagnostico médico y comprueban una mejoría de los síntomas al quitarse el gluten de su dieta habitual.
También existe una saturación de la harina de trigo por su excesivo uso en los alimentos envasados industrializados. No son solo los productos clasificados como carbohidratos (panes, pizza, pastas) los que tienen gluten. Sin darnos cuenta estamos consumiendo gluten en productos donde es utilizado como espesante o aditivo- mermeladas, salsas, bebidas, golosinas, comidas preparadas, etc. En general, estamos consumiendo más gluten de lo que es natural para nuestro cuerpo, y éste a veces se resiente.
¿Qué pasa cuando consumimos exceso de harina de trigo refinada?
-Suprime la hormona glucagón utilizada para quemar grasa y azúcar.
- Se necesita comer más cantidad para tener sensación de saciedad.
- Aumenta el hambre: como el azúcar en la sangre aumenta después de una comida alta en carbohidratos, la insulina aumenta con el resultado eventual de menos azúcar en la sangre.
- El trigo es un cereal cuya genética ha sido modificada para alcanzar cosechas optimas. El problema es que nuestras enzimas no han logrado adaptarse.
¿Eliminar el gluten, es beneficioso para cualquier persona?
Esta claro que aquellas personas con algún nivel de intolerancia al gluten son los mas beneficiados de esta dieta, pero, algunos profesionales dictan que quitarse el gluten puede ser beneficioso para el intestino y sistema inmunológico de cualquier persona. Cuando se reduce la ingesta de gluten las vellosidades intestinales se regeneran, lo cual mejorará la capacidad de absorción de nutrientes por parte del intestino y la eliminación adecuada de los desechos y las toxinas. Además que permitirá nuevamente el crecimiento de la flora intestinal benéfica y el sistema inmunológico se reforzará.
En todo caso todos los expertos coinciden que lo importante es tener una alimentación equilibrada y variada basada en productos frescos y naturales.
Si no tienes una condición en que tu cuerpo rechaza el gluten, puedes probar como te sientes al dejar el gluten por un mes, investigar y explorar el abanico de productos y alimentos que existen para reemplazar la harina de trigo. Después ir introduciendo el gluten nuevamente en tu dieta en medidas reducidas, buscando que tu dieta sea lo más nutritiva y equilibrada posible.
La harina y derivados del trigo se puede sustituir por cereales integrales y especialmente por lo llamados "pseudocereales" como el amaranto y la quinua. La harina de estos es un excelente reemplazo por su alto valor nutricional.
La quinua es una muy buena fuente de carbohidratos de bajo índice glicémico y rica en manganeso, magnesio, calcio, cobre, hierro, fósforo, vitamina E y varias vitaminas del complejo B. Contiene un equilibrio casi perfecto de los 8 aminoácidos esenciales que necesitan los seres humanos. El amaranto es una de las fuentes más importante de proteínas, ya que supera a la mayoría de los cereales, contiene vitaminas A, B, C, B1, B2, B3, y altos valores de minerales como la niacina, calcio, hierro y fósforo. Se recomienda como parte de las dietas hiperenergéticas e hiperproteícas y en las hipocolesterolemiante.ededor de 70 millones de estadounidens es -el 29% de la población adulta